No es tan difícil de conseguir: basta con utilizar los cosméticos labiales adecuados.
Cosméticos labiales
¿Cuál debe ser la mejor barra de labios? Sin duda, debe tener una gran fragancia que te anime a seguir frotándote los labios. Nuestras selecciones son una barra de labios hidratante con aroma a frambuesa o una barra de labios protectora con aroma a miel. Por supuesto, quienes tengan una piel especialmente sensible pueden optar por una barra de labios hidratante sin perfume.
Bálsamo labial
La base del cuidado de los labios es el bálsamo labial. Puede ser un bálsamo labial en bola, un bálsamo labial en tarro o una crema labial. Los distintos bálsamos labiales difieren no sólo en su aroma y sabor, sino también en su consistencia. Algunos son más cremosos, otros pegajosos como un gloss. Por definición, una barra de labios protectora debe proteger los labios del viento, el frío y el sol, pero también puede dar a los labios un brillo sutil o incluso color.
Regenerador labial
Se recomienda una barra de labios hidratante para los labios secos e incluso agrietados, y un regenerador labial para los labios extremadamente secos e incluso agrietados. La lanolina natural también es una gran opción. En su forma pura, sin aditivos, la lanolina es una sustancia hipoalergénica que hidrata intensamente la piel, calma las irritaciones y favorece la cicatrización de pequeñas heridas. La lanolina es un bálsamo labial totalmente seguro, recomendado para los labios muy resecos por el viento y las heladas invernales.
Exfoliante labial
¿Qué más, aparte de una barra de labios hidratante? Un exfoliante labial. Sí, todas las partes del cuerpo merecen una buena exfoliación, incluidos los labios. Un exfoliante labial es un cosmético extremadamente suave que elimina eficazmente las pieles muertas sin irritar la piel de los labios. Un buen exfoliante labial tiene una composición natural y utiliza, por ejemplo, partículas de xilitol para la exfoliación. ¿Cómo se utiliza el exfoliante labial? Masajea los labios con una pequeña cantidad del producto hasta que se disuelvan las partículas de azúcar. Los labios tratados están más suaves y tienen un mejor riego sanguíneo: ¡listos para besar!